Envasado y listo

Envases de plástico, de cartón, de aluminio, envasado al vacío... conocemos muchos tipos de envases. Junto con el desarrollo de nuevas tecnologías (en especial de la nanotecnología) el mundo del envasado también a visto salir a la luz nuevos productos.

Dos nuevos tipos de envases

Con el fin de alargar la vida la vida comercial y de proporcionar mayor calidad e información al consumidor, han aparecido dos nuevos tipos de envases:
  • Envase activo: Son aquellos que, aparte del alimento, albergan algún tipo de combinación de gases o sustancias antimicrobianas (la causa más frecuente de la alteración de los alimentos frescos o procesados es el crecimiento de microbios), que interaccionan con el producto de tal manera que se consigue alargar su vida comercial de manera segura. No ofrece ningún tipo de información adicional al consumidor con respecto a la que ofrecería un envase tradicional  
  • Envase inteligente: Este envase funciona de manera completamente distinta en cuanto a la información que le da al consumidor con respecto al envase activo. Este envase tiene como objetivo proporcionar la mayor cantidad de información posible al consumidor acerca del estado del producto que alberga el envase. La información se proporciona siguiendo la siguiente lógica:
    1. Se produce una reacción entre el propio alimento y el envase. Para ello, es necesaria en el envase la presencia de sustancias capaces de sufrir cambios junto con el deterioro del alimento. 
    2. La reacción da lugar a una modificación en la etiqueta que informa al consumidor del estado del producto. Para ello es necesaria la presencia de sensores en el envase (es aquí donde entran en juego los nanosensores) que detecten esos cambios e informen al consumidor del estado del producto. 

¿Se encuentran ya en el mercado?

Bien, tal vez la respuesta a esta pregunta te de la sensación de que no responde a nada, pero allá va: en teoría sí, pero yo no he visto ninguno. Me pasé por el supermercado en busca de estas etiquetas y ya con la primera me encontré con el primer problema: si no ofrece información adicional al consumidor, ¿cómo se puede saber si es un envase activo o no?. El segundo tipo de envase es evidente que es muy reconocible, pero tal y como te venía diciendo, no vi ninguno. Sin embargo, Eroski dijo en 2012 que iba a sacarlos al mercado para que hubiera un mayor control sobre la seguridad alimentaria. ¿Qué ha pasado?¿Se echaron atrás o es que me he fijado poco?¿Conoces algún supermercado en el que haya envases inteligentes?

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Fuentes para el reportaje

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